En Japón se conoce como el “masaje de la juventud”. Es un tratamiento único que surge de una rama de Anma, un antiguo sistema de terapia de masaje tradicional japonés.
Es un conjunto de antiguas técnicas que combinadas entre si, dan lugar a un tratamiento manual del cuello, cara y cabeza.
Produce un efecto de “Liftin Natural” visible desde el primer tratamiento.
Según la tradición japonesa, la belleza es el reflejo de un estable “equilibrio” entre el cuerpo y la mente.
Las técnicas utilizadas en este tratamiento está dirigidas a mantener o volver a crear ese equilibrio ayudando a mejorar la condición natural de la piel y minimizando el proceso de envejecimiento.
En la práctica, este tratamiento permite no sólo tener una cara agradable, sino que ayuda a todo el cuerpo a sentirse en calma y relajado.
La sesión tiene una duración de 60 minutos y notarás el efecto desde la primera sesión. Para unos resultados óptimos y duraderos a largo plazo se recomienda un mínimo de 8 sesiones, una a la semana, y después y siempre dependiendo de varios factores distintos en cada persona es recomendable una sesión al mes o cada mes y medio como mantenimiento.